En los últimos años con los avances culturales motorizados por movimientos sociales y políticos que buscan resaltar y saldar deudas viejas en cuanto a desigualdades y exclusión social, cada vez son más fuertes las miradas que pueden visibilizar actos retrógrados y conservadores que se desarrollaron durante décadas sin tomar conciencia de su significado y consecuencias.
Los concursos de belleza, y “elecciones de la reina” son una clara muestra de que nos falta mucho por entender como sociedad en cuanto a dos conceptos: cosificación y estereotipos, quizás poco comprendidos al menos, claro está, en la localidad de Cerrillos. Es que, a pesar de un comunicado emitido por el ministerio de educación de la provincia de Salta, donde claramente manifiesta su desinterés por las realizaciones de elecciones de la reina en toda la provincia, en Cerrillos se realizan estos eventos con total normalidad y se promocionan desde la Municipalidad.
En Salta Capital, por ejemplo, la municipalidad informo que no elegirá reinas ni se presentara en la elección de la reina provincial que se realizara en Apolinario Saravia, pero si festejara la semana del estudiante con diferentes actividades lejos de concursos de belleza, sino con un trabajo superador donde se destaquen, por ejemplo los valores académicos, deportivos y artísticos.
El INADI también manifestó su repudio a los eventos de belleza.
En las pasadas horas la delegación salteña del Instituto Nacional contra la Xenofobia y el Racismo (INADI) emitió un comunicado cuestionando la realización del evento al señalar que «la elección de la reina continúa ubicando a las mujeres en lugar de objeto, cosificable y consumible, como lo señaló el Observatorio de violencia contra las Mujeres. También sostiene y reproduce los estereotipos racistas, clasistas y de género».
Además, el INADI en el mismo comunicado insta a «evitar toda violencia simbólica y la cosificación de las jóvenes y advierte que las normas que buscan regular los certámenes de belleza constituyen una práctica discriminatoria, sexista y de violencia simbólica e institucional contra las mujeres».
Así también, llamó a la reflexión de los organizadores y se puso a disposición «para llevar adelante campañas de formación y sensibilización para transformar este tipo de prácticas en eventos que promuevan la solidaridad, la inclusión de las diversidades e identidades de género y la participación juvenil».